Para los necrófagos

Más noticias increíbles, lo he escuchado hoy en las noticias (en esta ocasión la fuente es esta)

La policía halló in fraganti en un apartamento a José Luis Calva Zepeda, justo en el instante en que estaba cenando, aderezados con limón, los restos de su pareja, la joven de treinta años, Alejandra Galeana. "Lo llegué a ver con su novia alguna vez, y para nada parecía un tipo violento", asegura un vecino.

El cuerpo de la mujer se encontraba diseccionado en distintas estancias del apartamento donde vivía José Luis. Un escabroso hallazgo cuyos detalles preferimos no relatar. "Que no deberían dejar que saliera de la cárcel. En cuanto sale vuelve a hacer de las suyas. Esta clase de gente no debería de estar en ningún lado", comenta una ciudadana mexicana.

A José Luis también se le supone sospechoso de al menos otros dos crímenes en un caso que cumple punto por punto con los tópicos del cine de terror. El asesino era una fallido escritor que se encontraba dando los últimos toques a su novela titulada ni más ni menos que "Instintos caníbales". Un tratado sobre la antropofagia, el sexo y el masoquismo. No en vano uno de sus ídolos es Hannibal Lexter, el voraz protagonista del "El Silencio de los Corderos", al que no ha dudado en emular. Una vez más, la realidad supera a la ficción, con creces.